miércoles, 26 de septiembre de 2012

UN LUGAR MUY EQUIVOCADO


El año pasado escribí sobre Un lugar equivocado (Sinsentido, 2011) que era «el libro que había que tener». La presentación internacional del joven belga Brecht Evens era deslumbrante por su pincelada fluida, su uso del color pictórico en el cómic y un concepto revolucionario del espacio en la página. Un lugar equivocado era una obra de sensaciones e impresiones volátiles, un torbellino informal de imágenes y emociones juveniles que triunfaba más por lo que sugería que por lo que decía.

En su nueva obra larga, The Making Of (Drawn & Quarterly, 2012; que está publicada, o a punto de ser publicada en España por Sinsentido bajo el título Los entusiastas), Evens vuelve a hacer un despliegue gráfico de primera categoría, casi un catálogo de recursos, y además se aplica en armar un guión sólido y coherente mucho más que en Un lugar equivocado. A partir de un tema eterno, la vieja lucha de la naturaleza contra la cultura, que llevada al terreno del arte se convierte en inspiración vs. educación, al fin y al cabo un tema muy de estudiante de arte, Evens perfila personajes, pule el argumento y encadena anécdotas con una rotundidad que dista mucho de la fragilidad narrativa de su obra anterior. Lo que hace Evens es construir con mano firme una clásica sátira social burguesa, muy al gusto europeo y especialmente francés.

Con esto, para mí Evens se sitúa en un lugar muy equivocado desde el que plantear su manera de hacer cómics. Todo lo que es abierto en su espléndida personalidad gráfica se vuelve cerrado en su provinciano guión literario. Evens ha escrito su libro con buena letra y redacción impecable, pero no ha podido evitar los tópicos de un argumento muy manido y unos personajes muy sobados que convierten la supuesta crítica corrosiva en complaciente guiño entre pares. Si una virtud tiene Evens es precisamente su caudal visual, que aquí se vierte en una diversidad de recursos narrativos -hay algo de manual de estilo a lo Asterios Polyp también en The Making Of-, puntuados por citas recurrentes a la historia de la pintura, que parten precisamente de La ciudad, de Grosz, uno de mis cuadros favoritos. El gran poder de Evens está en sus imágenes, como dejó claro en Night Animals (Top Shelf), una maravillosa fabulita contada con un encadenado de ilustraciones. Incluso en The Making Of lo demuestra, en dos páginas que anteceden al inicio del propio relato y que, a la manera del vía crucis, condensan la novela gráfica entera en sólo doce imágenes sin palabras. Y lo hacen con mucha más potencia y sutileza que las 200 que vienen a continuación.

Quiero con esto decir que siento toda la simpatía del mundo hacia las páginas de Evens, pero creo que su comedieta moral de clase media a la francesa está muy por debajo de sus verdaderas posibilidades. Y ni siquiera es porque tenga antipatía por el género: Lauzier es uno de mis autores favoritos de siempre.

Con The Making Of confirmo que cada vez me interesan menos los guiones competentes y las historias bien contadas. Lo que quiero son imágenes que me entren por los ojos.

1 comentario:

JC malaga dijo...

"…confirmo que cada vez me interesan menos los guiones competentes y las historias bien contadas. Lo que quiero son imágenes que me entren por los ojos." Comprendo tu punto de vista pero personalmente echo en falta historias bien contadas, historias en las que fluya la narración y te arrastren hasta el final, manteniendo el interés.