lunes, 15 de octubre de 2012

LA NOCHE DEL MURCIÉLAGO 65: HUGO STRANGE


(PARTE DEL CAPÍTULO MONDO BATMAN)

HUGO STRANGE

El más antiguo de los enemigos recurrentes de Batman (al menos mientras no resuciten al Doctor Muerte y al Monje Rojo), Hugo Strange apareció en Detective 36 (1940) y fue liquidado sumariamente en Detective 46 (1940). Descrito como “El profesor Hugo Strange. ¡El hombre más peligroso del mundo! Científico, filósofo y genio criminal... poco se sabe de él, pero es indudable que este hombre es el mayor organizador de crimen del mundo...”, en aquellos momentos es el esterotipo del científico loco, que utiliza armas químicas (“la niebla”) y convierte a los hombres en monstruos sin cerebro para ejecutar algún loco plan de dominación universal. ¿Quién podía sospechar que Steve Englehart tendría el valor de rescatarlo para convertirlo en uno de los más inquietantes enemigos del Señor de la Noche 37 años después? En Detective 471 (1977), Strange regresa para infligir a Batman su más completa derrota, descubrir su identidad, apresarle y suplantarlo como Bruce Wayne. La saga de Hugo Strange, que aparentemente había sido asesinado por el jefe mafioso Rupert Thorne, fue concluida por Gerry Conway y Don Newton a principios de los 80, pero eso no fue el final del buen profesor. Ignorando la “continuidad oficial”, Doug Moench y Paul Gulacy exploraron su compleja psique en “Prey” (Legends of the Dark Knight 11-15, 1990-91), una agotadora zarzuela en la que el sexo se mezcla con otras obsesiones.

La serie de animación ha dotado a Strange de un encantador acento nazi, pero evidentemente le ha descargado de algo de gravedad, o sus episodios no habrían sido autorizados para menores.

Aunque Strange tiene una presencia en las aventuras de Batman mucho menos importante en cantidad que el Joker o Dos Caras, en calidad está a la altura de estos dos rufianes, pues se ha rodeado de un aura mítica de enemigo definitivo. Al fin y al cabo, él no necesita regresar cada seis meses con un nuevo plan, con una vez le bastó para someter al Murciélago.

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