jueves, 27 de septiembre de 2012

MEMORIAS DE UN HOMBRE DE ILUSTRACIÓN


Alguna extraña conexión mental me lleva del post anterior sobre Los entusiastas de Brecht Evens a este en torno a Jean Baptiste Baigorri 1: Cramond Island (Nobrow 2012), de Irkus M. Zeberio. Como el de Evens, el de Zeberio es un cómic muy visual, muy de escuela de arte, aunque en este caso más orientado hacia la ilustración, el diseño y las artes gráficas en general (incluso también hay en su combinación de línea, manchas de color básicas y espacio en blanco algo que recuerda a Asterios Polyp). Cramond Island es, desde luego, uno de esos cómics que reclamaba en la última frase de aquel post: un cómic que me entra por los ojos. Y si consigue sugerirme un abismo infinito con cada imagen, es precisamente porque todas las deja abiertas. En lugar de posarse sobre el firme cimiento de un guión sólido, sus viñetas pasean y hacen cabriolas sobre un laberinto de alambres.

El Baigorri protagonista es un Aviraneta del alma, un viajero espiritual que recorre el paisaje de su propio inconsciente simbólico en un periplo surrealista que tiene la gravedad y la ligereza del Entreacto (1924) de René Clair, una farsa sobre la muerte de imágenes precipitadas al vacío de la vida moderna. Cramond Island es, por tanto, uno de esos tebeos que cuenta poco y dice mucho. Para entenderlo sólo hay que tener una clave: no distraerse demasiado leyendo las palabras.

4 comentarios:

Pepo Pérez dijo...

Otro dibujante del que ni siquiera había oído hablar. Lo que acabo de ver en su web me ha parecido fantástico.

Santiago García dijo...

¡Éste es de San Sebastián!

Toni Mascaró dijo...

Pronto compartirá un cómic grapado con Sergi Puyol para Apa Apa! :D

Santiago García dijo...

Qué gran noticia, Toni. ¡Bravo!